Es ante todo un juego de tablero para varios jugadores; de movimiento por casillas, uso de cartas para ordenes, habilidades, personajes y dados especiales para el combate y acciones. Un jugador representa al Imperio (como si de un Director de Juego se tratase) y los demás tienen una serie de personajes rebeldes que se enfrentan a él en diversas misiones, que pueden estar unidas en forma de campaña. Realmente el juego, tanto por mecanica, como al pertenecer a la misma compañía, se podría decir que es un hermano "futurista" del Descent.
Hasta aquí nada nuevo, pero lo importante para este articulo es que este juego se puede jugar en modo escaramuzas entre dos jugadores, siendo esto una divertida diferencia con otros juegos similares. Ya podemos hablar así de un wargame de miniaturas. Cada jugador se hace una pequeña fuerza de combate compuesta por figuras de su bando (y sus correspondientes cartas de personajes) más una serie de cartas de ordenes que podrá ir usando para ayudar a sus tropas. Todo tiene un coste en puntos para que el combate este igualado.
Las partidas se realizan mediante escenarios, para que el juego no se comvierta en un simple "mata-mata", representado por cartas de escenario, donde reflejan las condiciones de victoria y reglas especiales para ese escenario. Además cada carta de escenario es acompañada por una hoja de reglas donde se especifican entre otras cosas, la historia del escenario y la colocación de las losetas para el mapa. Nosotros hemos jugado a "No dejar pruebas".
Existen una serie de cajas repartidas por el exterior que los jugadores deberán hacer suyas para ganar puntos de victoria, más los que puedan obtener por la bajas del enemigo. Además en el interior de la base se encuentra un control de comunicación para poder realizar un bombardeo orbital que afectaría a las miniaturas del exterior. Para terminar con los elementos del escenario hay varios ordenadores en el mapa que otorgan más cartas de ordenes al jugador que los controle.
Estas son las fuerzas de despliegue del Imperio Galáctico. Esta compuesto por: Darth Vader, dos oficiales, un Ingeniero E-Web y dos grupos de tropa de stormtroopers (de 3 figuras cada grupo).
El oponente tenia una fuerza de Mercenarios, que gracias al uso de una carta de despliegue (Alianza temporal) se les había unido unos rebeldes. Esta compuesto por IG-88, dos grupos de cazadores trandoshanos (un grupo de elite y otro normal, de dos miniaturas cada uno), un Nexu y sus aliados, un grupo de tropa rebelde (con tres miniaturas). Lamentablemente la miniatura del Nexu se olvido a ultima hora y debimos usar una figura alternativa. Preferimos para este informe no sacar fotos de dicha miniatura.
Tenemos que destacar el estupendo trabajo de nuestro compañero Alejandro del club Dragones y Castillos con la pintura de las miniaturas, ya que esto le da una gran vistosidad a una partida.
Aquí podemos ver el despliegue de los mercenarios y los rebeldes. Las losetas grises y cuadradas de cartón que se hayan sobre el mapa son las cajas del escenario.
En la siguiente foto se encuentra la zona de despliegue de los imperiales. La ficha redonda de cartón que se haya a la izquierda es el control de comunicaciones para el bombardeo orbital.
La amenaza del bombardeo orbital pesó mucho en la partida, de tal modo fue así, que la mayor parte de las tropas de un bando y otro buscaron refugio dentro de la base. Pronto el hábil IG-88 se pudo hacer cargo del comunicador, pero no se atrevió usarlo ya que aun tenia tropas suyas en el exterior.
En el interior de la base se formo un terrible "corredor de la muerte" donde ambos bandos cruzaron decenas de disparos láser. La habilidad del IG-88 y la pericia de los trandoshanos prevalecieron sobre los erráticos disparos de los stormtroopers, aunque el arma pesada del ingeniero y gracias a las ordenes de los oficiales, hizo mucho daño tanto al androide como a las tropas rebeldes. Mientras en el exterior se produjo un singular combate entre el peligroso Nexu y el temible Darth Vader. La bestia no fue rival al final para el malvado lord, pero le costó el tiempo suficiente en acabar con él como para que sus tropas sufrieran graves bajas.
A partir de aquí el combate se encarnizó. Darth Vader se vio en inferioridad de tropas, pero en combate el lord sith era terrorífico, sus enemigos caían por donde el pasaba. La fuerza mercenaria - rebelde cambió de estrategia, marchando al exterior para recoger las cajas e intentar ganar por puntos. Esto le valió al imperio para realizar un ataque de bombardeo orbital que dejó muy maltrecho a sus enemigos. Darth Vader destruyó al IG-88 valiéndose de la fuerza y el futuro se volvió oscuro para sus adversarios. Pero al final los mercenario (ya no quedaban rebeldes vivos) se hicieron con la victoria, al coger las suficientes cajas para ganar por puntos.
Conclusiones:
El juego es un gran juego en sí, más allá de la simple táctica de llamar la atención con la franquicia. Si te gusta el Descent, este seguro que te gustara. Además cuenta de esta nueva modalidad de escaramuzas, una autentica delicia para los wargameros de uno contra uno.
Lo mejor:
- Modalidad multijugador y de campaña en el juego de mesa y modalidad escaramuza para dos jugadores.
- Bastante rejugabilidad. Existen diversas misiones y puedes hacer diferentes bandas además de cartas de ordenes diferentes.
- Es Star Wars. Y con unas minis muy chulas y unos componentes de buena calidad.
Lo peor:
- Pocos tipos de miniaturas (y con la misma pose) y de precio muy elevado.
- El sistema de casillas y el mapa de puzzle puede que no invite a jugar a jugar a los wargameros que prefieran más libertad de acción en sus mesas.
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